Pocos lugares hay en el mundo que concentren tanto atractivo en tan poco espacio, tantos y tan variados encantos por unidad de superficie, dicen los autores de esta guía. Y añaden que Cantabria es un triunfo de la Naturaleza. Y en realidad debe ser cierto porque la naturaleza en Cantabria está por todas partes, se ve, se siente, se goza y se paladea. El territorio geográfico, cultural y gastronómico de Cantabria es soberbio. La cordillera y el mar Cántabros definen la rotunda y espléndida orografía de este país, la cueva de Altamira sería -sin ser única, por supuesto- su mejor tarjeta de presentación histórica y cultural. Pero... ¿por qué no lo contamos todo mientras tomamos un plato de marmite en Laredo, o un cocido montañés en alguno de sus reputados restaurantes?