En un rincón de la galaxia hay un planeta parecido a la Tierra, pero con una diferencia muy peculiar: todos sus habitantes son superhéroes.
Bueno, no todos...
Piedra Sencilla es el único que no tiene poderes especiales, por eso sus padres le llamaron así. Y, a pesar de ello, es el único capaz de enfrentarse al peligroso gigante que amenaza su planeta.