En un pequeño pueblo de la costa del mar Báltico, Lena aprovecha las vacaciones veraniegas para ayudar en el restaurante de su padre, cuyo interior está decorado con un impresionante mascarón de proa llamado Borrasca, perteneciente a un barco naufragado en el siglo XVIII. A Lena le encanta esa magnífica pieza con forma de cabeza, que parece mirarla con sus ojos de cristal llenos de secretos y promesas de aventuras. Y, precisamente, cuando un restaurador se dispone a trasladarla a su taller, ¡comienzan a suceder cosas extrañas y emocionantes! Para empezar, Lena conoce a Félix, un chico tan ávido de desentrañar misterios como ella y, poco después, lo más increíble de todo? la orilla del mar se retira varios kilómetros, dejando al descubierto el esqueleto de un barco. ¿Qué significará todo aquello? El instinto le dice a Lena que el buque fantasma que yace en la playa tiene mucho que ver con ella y con sus antepasados.