Sasha ha escapado con Ivonne de las redes de Oblivion, aunque para ello ha tenido que refugiarse en Bricklane, el barrio hipster de Londres. Allí, verán una campaña publicitaria de un fármaco para despertar el amor... y donde ellos dos son los protagonistas. A la vez, son convocados a un viejo parque de atracciones abandonado, donde se iniciará un juego que pondrá en peligro su amor y sus vidas.