El ruiseñor de Keats era inmortal, pero hay ruiseñores que sólo pudieron acceder a la inmortalidad a través de su condición fantasmal. La historia de este fantasma recluido en un purgatorio de dimensiones vagas y en un lugar incierto, empieza cuando un niño oscuro, de un oscuro pueblo, y en una fecha oscura de la historia de España, empieza a recibir las visitas de su abuelo muerto. Si Días de Reyes Magos era un elogio de la literatura escrita, El fantasma anidó bajo el alero pretende ser un elogio de la literatura oral. Sosteniendo la trama, un bastidor tejido de luz y sombras, de amores y odios, de generosidad y envidia. Como la vida misma.