Fernando, un chico bajito y delgado, va un día de excursión al zoo. Allí conoce un oso muy especial, al que le gustan los polos helados y, además, habla. El oso le pide a Fernando que lo saque de allí; quiere volver a su casa. A pesar de todas las dificultades con las que sabe se va a encontrar, Fernando decide ayudarle y lo que en un principio parece imposible no lo será tanto, porque la verdadera amistad es capaz de todo.