«Actor, amante del arte, filántropo y ahora escritor; su libro es una conmovedora y valiente revelación de un hombre del Renacimiento. Sabía que Eddie era un hombre ingenioso, noble y de gran sensibilidad. Ahora el lector de este libro también lo sabrá. ¡Ave, Pequeño César!» —Hall B. Wallis «Leo el libro de Eddie con nostalgia, cariño y un profundo recuerdo del mundo en el que vivía.» —Ira Gershwin «Se trata de un libro irrepetible porque sólo ha habido un Edward G. Robinson en este mundo. Está en posesión de la verdad; es un hombre completamente honesto, decente, cariñoso, y su calidez aflora en ‘Todos mis ayeres’. He disfrutado de cada página de esta historia increíble pero cierta. En mi opinión es el mejor libro que ha salido de Broadway o Hollywood (¡incluso de Rumanía!) en muchos años.» —Irving Stone «Un libro extraordinario […] un excepcional autorretrato. Compartimos intrínsecamente sus éxitos y fracasos, sus alegrías y penas, sus enemistades y simpatías. ‘Todos mis ayeres’ es ingenioso, conmovedor y, sobre todo, al igual que el propio autor, reconfortantemente honesto.» —George Seaton «Una experiencia emocional y conmovedora, enaltecida tanto por la dignidad y humanidad del propio Robinson como por las reflexiones del Sr. Spigelgass sobre los aspectos de su personalidad que lo convertían en un hombre memorable. […] Es una triste ironía que él mismo falleciera antes de terminar el libro […] pero siento una gran satisfacción al saber que, a través de sus películas y de este libro, Edward G. Robinson sigue vivo.» —Arthur Knight